En 9,6% se situó la tasa de desocupación en Ñuble en el trimestre mayo-julio de 2022, lo que representó una caída de 0,8 puntos respecto a igual periodo del año pasado, pero un aumento de 0,4 puntos en comparación con el trimestre abril-junio de 2022, según el informe de empleo que publicó ayer el INE.
Con este dato, Ñuble se mantiene como la región con la tasa de desempleo más alta del país, seguida más atrás por Atacama y Tarapacá, ambas con 9,2%, y muy lejos del promedio nacional, que alcanzó 7,9%, al sufrir una caída interanual de 1 punto.
[bg_collapse view=”button-orange” color=”#4a4949″ expand_text=”Leer más” collapse_text=”Menos” inline_css=”width: 100%” ]
Según el informe, la fuerza de trabajo aumentó 2,3% en 12 meses, lo que significa que el número de personas en el mercado laboral subió desde 220 mil a 225 mil, un dato clave que da cuenta del regreso de las personas al mundo del trabajo, tras la pandemia. No obstante, la cifra aún está lejos de la prepandemia, de hecho, en mayo-julio de 2019 llegaba a 238 mil.
El economista Renato Segura, director de Desarrollo Económico de la Municipalidad de Chillán, destacó que ello muestra una recuperación del dinamismo del empleo en Ñuble.
“Recordemos que durante la pandemia mucha gente salió de la fuerza de trabajo y empezó a recibir beneficios del Estado, y eso implicó que bajamos del 50% de participación, llegamos a 46-48%; y eso hoy ha cambiado radicalmente, porque se acabaron los subsidios y los hogares necesitan generar mayores ingresos, por lo tanto, está ingresando gente al mercado laboral, la participación está en 53,2%, y eso ha generado una presión fuerte en búsqueda de empleo, por lo tanto, la tasa de desempleo se presiona al alza”, afirmó.
Sin embargo, advirtió que si bien es positivo que más personas retornen a la fuerza de trabajo, habrá un periodo de transición en que no todos encontrarán un empleo inmediatamente, lo que pudiera llevar la tasa de desocupación a dos dígitos, aunque ello debiera ser puntual, ya que los empleos estacionales absorberán parte de esa mano de obra disponible.
En esa línea, recordó la reciente feria laboral de la OMIL Chillán, donde se ofrecieron más de 7 mil vacantes.
Segura acotó que los subsidios a la contratación también han tenido un efecto positivo como incentivo a buscar empleo y a la creación de puestos de trabajo.
Por su parte, Miguel Hernández, analista del Observatorio Laboral del Sence Ñuble y la Facultad de Ciencias Empresariales de la UBB, destacó el alza de 11,4% de los inactivos que declaran su deseo de trabajar.
Ocupación
Asimismo, los ocupados en la región aumentaron 3,1% en 12 meses, al pasar de 197 mil a 203 mil, es decir, se crearon 6.167 empleos netos.
Según explicó Hernández, este aumento estuvo incidido por el crecimiento de 9,1% en las mujeres ocupadas, en contraste con la caída de 0,7% en los hombres ocupados. Así, la tasa de desocupación femenina disminuyó 0,2 puntos en 12 meses, para ubicarse en 9,6%, mientras que el desempleo en hombres bajó 1,2 puntos, y también alcanzó 9,6%.
Respecto a los sectores económicos, el aumento de los ocupados fue empujado por la construcción, que creció 12,4%; y la agricultura, con un alza de 2,3%. En contraste, enseñanza mostró una caída de 10,6%.
La mala noticia es que el aumento de la ocupación se atribuye, en gran medida, al alza de 8,0% en los trabajadores informales en 12 meses, incidido por las mujeres (24,0%). Así, la tasa de ocupación informal llegó a 33,6%, con un aumento de 1,5 puntos.
[/bg_collapse]
