Por más tres horas se extendió una jornada de fiscalización al comercio ambulante de comida rápida en el centro de la ciudad de Chillán.
La Seremi de Salud y la Patrulla de Tránsito de la Segunda Comisaría de Carabineros encabezaron el operativo que dejó como resultado cuatro infracciones por falta de resolución sanitaria y autorización municipal.
Los infractores detectados ofrecían hand rolls, churros y empanadas fritas, por lo que las autoridades procedieron a retirar los alimentos para su destrucción.
Desde las 11:00 horas hasta las 14:30 horas realizaron la fiscalización a la venta itinerante de comida rápida.